jueves, 16 de diciembre de 2010

Lo que dejé por ti

HOY 16 DE DICIEMBRE ES EL ANIVERSARIO DEL NACIMIENTO DEL POETA RAFAEL ALBERTI: UN POETA, UNA CIUDAD Y UN POEMA.










LO QUE DEJÉ POR TI
Dejé por ti mis bosques, mi perdida
arboleda, mis perros desvelados,
mis capitales años desterrados
hasta casi el invierno de la vida.
Dejé un temblor, dejé una sacudida,
un resplandor de fuegos no apagados,
dejé mi sombra en los desesperados
ojos sangrantes de la despedida.
Dejé palomas tristes junto a un río,
caballos sobre el sol de las arenas,
dejé de oler la mar, dejé de verte.
Dejé por ti todo lo que era mío.
Dame tú, Roma, a cambio de mis penas,
tanto como dejé para tenerte.







martes, 30 de noviembre de 2010

Tarjeta roja a la mentira

Soy mujer, orgullosa de haber nacido mujer y si naciera de nuevo y pudiera elegir, elegiría ser mujer.
Pero antes, soy persona. Por eso, en estos días en que tanto hemos escuchado hablar del Día de la Violencia de Género me pregunto:

- Si las personas tenemos sexo y no género como las palabras, ¿por qué llamarla violencia de género y no de sexo?
- Es más, si por género se entiende el femenino, ¿por qué no llamarla violencia doméstica o de hogar teniendo en cuenta que también hay maltrato de padres a hijos, de hijos a padres o de esposas a maridos?
- ¿Por qué se silencian las cifras de maltrato masculino?
- ¿Por qué desde el 2002 se publicaban las listas de mujeres y hombres asesinados por sus cónyuges, parejas o ex parejas y desde el 2007 sólo se publican las listas de mujeres asesinadas pero no de los hombres?
- ¿Por qué no hemos conocido en los telediarios del 2009 que 30 hombres fueron asesinados el año pasado a manos de una mujer?
- ¿Por qué cuando un hombre se acerca a una comisaría a declarar tiene que pasar la vergüenza de que, en algunos casos, se rían de él y lo menosprecien?
- ¿Por qué si un hombre telefonea al número de maltrato 016, le responden que no pueden atenderle porque es un hombre ( comprobado por un reportero de El Confidencial que se hizo pasar por hombre maltratado).
- ¿Por qué en el 2006 se suicidaron en España 3716 hombres y en muchos casos el motivo fue por los efectos discriminatorios de una Ley Integral de Protección contra la violencia de género, que permite que haya mujeres que interpongan una denuncia falsa de maltrato contra los hombres y puedan quitarles de un plumazo su hogar, hijos, los estigmaticen de por vida y se lleven años intentando demostrar su inocencia desde la barrera de una orden de alojamiento?
- ¿Por qué los organismos oficiales decidieron eliminar el estado civil de estas listas de suicidas? ¿Para que no se pueda comprobar si son separados o divorciados?
- ¿Por qué de los 9.814 procedimientos (denuncias) que se tramitaron en el Juzgado de Violencia de Género de Sevilla en el año 2008, sólo se condenaron 395 casos, 412 fueron absueltos, 203 llegaron a condenas de conformidad, y el resto…8804 denuncias, casi el 90% restante, fueron archivadas por falta de pruebas?
- ¿Por qué no se abre un proceso judicial contra aquellas mujeres que interpongan una denuncia falsa y ésta quede demostrada?
- Y lo más importante, ¿a quién está beneficiando todo lo anterior y por qué esta falta de información y este punto de vista tan sectario de una situación tristísima tanto para hombres como para mujeres...?

…QUE ME LO EXPLIQUEN…

domingo, 21 de noviembre de 2010

Miguel

Esta semana he tenido la suerte de conocer a una de esas personas diez que se cruzan una vez en la vida. Se llama Miguel y es peruano. Miguel era un hombre de éxito, jugador profesional de fútbol y una lesión le obliga a retirarse. Acude a la universidad y estudia una carrera que le permite acceder a un importante puesto de trabajo y ganarse la vida bastante bien, buena casa, buen coche, buena vida. Al nacer su tercer hijo tiene la desgracia de que este fallezca con seis meses de un ataque cardíaco. Él tuvo la suerte de disponer de dinero para, al menos, intentar salvarle la vida en el hospital. Allí pudo contemplar la desesperación de otras familias que perdieron a sus hijos porque se quedaban a las puertas del hospital con ellos en brazos sin ser atendidos por falta de fondos para poder pagar. Esto estremeció a Miguel. Esa misma noche otra familia perdió a su hijo pequeño y Miguel lo enterró junto con su hijo en el pequeño ataúd blanco porque no tenían para enterrarlo. Esto le cambió la vida a Miguel.
De vuelta para su casa se encontró con cuatro niños de la calle. Los recogió y llevó a su hogar. Les dio de comer, los aseó y esa noche pudieron dormir por primera vez en una cama caliente. Al día siguiente desaparecieron. Miguel no entendía qué había hecho mal y se defendió pensando que eran unos desagradecidos, de aquellos que muerden la mano que les da de comer. Sin embargo, para su sorpresa, esa noche los cuatro aparecieron ante la puerta de su casa para darle explicaciones del porqué de su huida. No se habían marchado por desprecio, se habían marchado porque tenían a otros compañeros en la calle y se sentían culpables de estar bien cuidados mientras el resto dormía abandonado bajo la luz de las farolas. Esa noche durmieron doce en casa de Miguel.
Hoy son más de ochocientos. Miguel vendió su gran casa y construyó un hogar para todos los niños de la calle que iba encontrando en una ladera de la ciudad de Lima, luego fue el coche y todas las pertenencias de “valor” que le quedaban. Hay días que no tienen nada para comer, pero él explica con una sonrisa que siempre ocurre un milagro que les permite comer esa jornada. Sus balones de juego son trapos liados con cuerdas y un balón de verdad es lo más maravilloso que pueden recibir. Tienen un taller de costura y cosen por diez centavos los Lacoste que luego lucimos en esta Europa tan irracional por diez centavos(creo que no llega ni a cinco céntimos de euro). Miguel les insiste en el estudio, en la importancia de formarse para el futuro, él y sus voluntarios les dan clase de todas las áreas, los llevan a la escuela , los obligan a estudiar inglés…, todo con un único objetivo, evolucionar y poder salir de la miseria.
Nunca he escuchado a nadie que hablase con tanta paz, no he encontrado en mi vida a una persona tan llena y que no tuviera absolutamente nada. Como él decía, allí no tengo candados ni alarmas, no me pueden robar nada, porque no tengo nada, y duermo estupendamente todas las noches.
Se despidió comentando que cada noche antes de dormir le dice al Flaco: “ Flaco, si la muerte me lleva esta noche, que me coja con una sonrisa”.

Pues sí, Miguel, que el Flaco te bendiga.

sábado, 30 de octubre de 2010

Los versos de Miguel Hernández inundan la red

"Hoy se cumplen 100 años del nacimiento de Miguel Hernández, poeta al que hemos ido recordando en Internet con numerosas actividades.Siguiendo la propuesta de otros blogueros literarios hagamos que la red se inunde con sus versos."

No pudimos ser. La tierra
no pudo tanto. No somos
cuanto se propuso el sol
en un anhelo remoto.
Un pie se acerca a lo claro,
en lo oscuro insiste el otro,
porque el amor no es perpetuo
en nadie, ni en mí tampoco.
El odio aguarda su instante
dentro del carbón más hondo.
Rojo es el odio y nutrido,
el amor pálido y solo.

Cansado de odiar, te amo,
cansado de amar, te odio.

Os dejo el vídeo que he preparado para el Homenaje en nuestro centro.

miércoles, 27 de octubre de 2010

Congreso Caballero Bonald "Enseñar la literatura"

Desde esta tarde y hasta el viernes 29, a las tantas, asisto al Congreso que este año ha organizado la Fundación Caballero Bonald sobre la literatura, con un título tan sugerente( al menos para los docentes) como "Enseñar la literatura".
Esta tarde dos importantes ponencias: Rodríguez Almodóvar con sus cuentos y su didáctica y Manuel Rivas, impresionante escritor, que nos ha embelesado con "La boca de la literatura" donde nos exponía cómo llegó él hasta ella.
En el descanso para el café( en mi caso colacao, como dicen mis compañeros, la niña del colacao) cavilaba sobre la diferencia entre asistir a un congreso de literatura, donde todos hablan de teoría y los escritores de sus obras, sus anhelos, su trabajo y el meterte todos los días en un aula e intentar conseguir que una veintena de alumnos se emocione con la literatura, lean, investiguen, escriban... El día y la noche. Los programas nos persiguen, hay que cumplir la temporalización, dar todos los temas, y al final te ves trabajando sobre la historia de la literatura y no como el profesor tan admirado de El club de los poetas muertos. ¿ Y por dónde comenzamos a cambiar esto?

Hoy hemos celebrado en nuestro centro, organizado por mi Departamento, un homenaje al poeta Miguel Hernández. Un grupo de teatro mallorquín ha representado parte de su vida a partir de las cartas del poeta a su esposa Josefina. En una segunda parte del acto, los alumnos han recitado poemas, compañeros profesores han leído, hemos mostrado un vídeo de su vida, el coro ha cantado poemas versionados, la voz de Víctor Jara ha resonado en el salón de actos con El niño Yuntero, y todos nos hemos emocionado con las Nanas de la Cebolla cantadas por el coro y recitadas por dos compañeras del departamento.

Si hemos conseguido que nuestros alumnos hayan conocido algó más de Hernández, comprendan su importancia en nuestra literatura y un sólo verso se les haya quedado grabado con esa tinta imborrable de los sentimientos, hoy lo habremos conseguido: hoy habremos enseñado y hecho literatura.

domingo, 24 de octubre de 2010

Carta de un hijo a todos los padres del mundo

No me des todo lo que pido.
A veces sólo pido para ver hasta cuánto puedo coger.

No me grites.
Te respeto menos cuando lo haces; y me enseñas a gritar a mí también.
Yo no quiero hacerlo.

No me des siempre órdenes.
Si en vez de órdenes, a veces me pidieras las cosas, yo lo haría más rápido y con más gusto.

Cumple las promesas, buenas o malas.
Si me prometes un premio, dámelo; pero también si es un castigo.

No me compares con nadie, especialmente con mi hermano o mi hermana.
Si tú me haces sentir mejor que los demás, alguien va a sufrir, y si me
haces sentir peor que los demás, seré yo quién sufra.

No cambies de opinión tan a menudo sobre lo que debo hacer.
Decide y mantén esa decisión.

Déjame valerme por mí mismo.
Si tú haces todo por mí, yo nunca podré aprender.

No digas mentiras delante de mí, ni me pidas que lo haga por ti. Aunque sea para sacarte de un apuro.
Me haces sentirme mal y perder la fe en lo que me dices.

Cuando yo hago algo malo, no me exijas que te diga el por qué lo hice.
A veces ni yo mismo lo sé.

Cuando estás equivocado en algo, admítelo y crecerá la opinión que yo tengo de ti, y así me ensañarás a admitir mis equivocaciones también.

Trátame con la misma amabilidad y cordialidad con la que tratas a tus amigos.
Porque seamos familia no quiere decir que no podamos ser amigos también.

No me digas que haga una cosa y tú no la haces.
Yo aprenderé siempre lo que tú hagas, aunque no lo digas. Pero nunca haré lo que tú digas y no hagas.

Cuando te cuente un problema mío, no me digas “eso no tiene importancia”.
Trata de comprenderme y ayudarme.

Y quiéreme y dímelo.
A mí me gusta oírtelo decir, aunque tú no creas necesario decírmelo.


H. Juan José Brunet

miércoles, 13 de octubre de 2010

Haiku

El haikai o haiku tradicional es un breve poema de origen japonés con muchos siglos de antigüedad que debe su nombre al poeta Shiki. Tradicionalmente el haiku buscaba describir los fenómenos naturales, el cambio de las estaciones o la vida cotidiana de la gente. Es una de las formas más bellas de la poesía japonesa.
Es una composición que consta de tres versos, el primero de 5 sílabas, el segundo de siete y el tercero de cinco, es decir, 17 sílabas (realmente se denominan moras : unidad lingüística de menor rango que la sílaba). Esta brevedad formal es el aliciente ,y el tener que encerrar un pensamiento en sólo tres versos no es fácil.

Existen muchos rincones de haiku, asociaciones alrededor de este tipo de poemas y casi todos los poetas que se precien lo han trabajado en algún momento de sus obras.

Mientras lo corto
veo que el árbol tiene
serenidad.

La poesía
dice honduras que a veces
la prosa calla.

Su voz aleja
el silencio, su mirada
trae la luz.

Elegante andar
el de la vaca
pisando violetas.

Huye la serpiente
y queda tranquila
la montaña de azucenas.

El ruiseñor
unos días no viene,
otros dos veces.


No juego al mus, pero ahí lanzo un órdago. ¿Quién se anima? Parece fácil. Si alguno no se siente muy satisfecho de su obra, se admiten anónimos…

viernes, 8 de octubre de 2010

Algo de humor...

En cierta ocasión una familia inglesa pasaba sus vacaciones en Escocia. Durante uno de sus paseos observaron una casita de campo que de inmediato les agradó y pareció cautivadora para su próximo veraneo. Indagaron quién era el dueño de ella, resultando ser un pastor protestante al que se dirigieron para rogarle que les mostrase la pequeña finca. El propietario se la mostró; y tanto por su comodidad como por su situación, fué del agrado de la familia que se mostró interesada en adquirirla para su próximo veraneo.
De regreso a Inglaterra, iban recordando detalle a detalle cada una de las habitaciones. De pronto, la esposa no recordó haber visto el W.C. y dado lo prácticos que son los ingleses, decidieron escribir al pastor protestante en los siguientes términos:


Estimado Pastor:

Soy miembro de la familia que hace unos días visitó su finca con deseos de adquirirla para nuestro próximo veraneo.

De regreso a casa, nos hemos percatado de un detalle desafortunado, y es que desconocemos dónde se encuentra el W.C. Podría indicarnos más o menos dónde se encuentra?

Al abrir la carta y leerla, el pastor, que desconocía el significado de la abreviatura W.C., creyó que se trataba de una capilla protestante llamada Wells Chapel ; y les contestó de la siguiente manera:


Estimada Señora:

Tengo el agrado de informarle que el lugar a que se refiere queda a 12 Km de la casa, lo cuál es algo molesto si se tiene la costumbre de ir con frecuencia, pero algunas personas llevan consigo la comida y permanecen allí todo el día.
Algunos viajan a pie y otros en tranvía, pero de ordinario llegan en el momento preciso.
Hay lugar para 400 personas cómodamente sentadas y para 100 más de pie. Los asientos están forrados en terciopelo púrpura. Además, hay aire acondicionado para evitar sofocaciones.
Se recomienda llegar temprano para ocupar un puesto.
A la entrada se les proporciona un papel a cada uno, y las personas que no alcancen al reparto, pueden utilizar el del compañero de asiento; pero al salir deben devolverlo para continuar usándolo durante todo el mes.
Todo lo que se deje allí depositado, será para dar de comer a los pobres huérfanos.
Hay fotógrafos especiales que tomarán fotografías en diversas posturas, las cuales serán publicadas en el diario de la ciudad en la sección: "Vida Social",
así el público podrá conocer a las personas en actos tan humanos.

sábado, 2 de octubre de 2010

Porque aprendí tarde

Porque aprendí tarde el dolor de la vida
tanta felicidad no podía ser eterna.
Otros habían sido abatidos desde temprano.
Conocía que los malos hados vendrían a buscar parte de mi dicha.
Hoy les agradezco que sólo se llevaran
un corazón enamorado.
Podía haber sido parte de mi hígado,
de mi cabeza o de mi razón.
¿Qué hacéis hados con mi corazón
en otro Olimpo? Estaba algo cansado
y no os sirve para nada.
Devolvedlo a este cuerpo errante y abandonado.
No os equivoquéis, no lo necesita para amar.
Siguió amando con médulas y sangre.
Pero este muñeco de hojalata
necesita que vuelva para marcarle
ese tic tac antiguo de la vida.
Y con ello tener la certeza
de que me habéis perdonado y no volveréis,
envidiosos, a llevaros de nuevo el fruto conseguido.
En ese caso, llevaos esta vez, mis ojos.
La luz de otros me acompaña.

domingo, 26 de septiembre de 2010

Reinas de verdad

Asisto estupefacta al circo mediático que se está orquestando alrededor de B.E (léase Belén Esteban, se me atrofian los dedos hasta para escribirlo). No sé a qué mente iluminada le ha dado porque la tengamos hasta en la sopa. El jueves un programa especial La princesa del pueblo (Dios, hasta donde hemos llegado), el viernes en la misma cadena aparece para comentar el documental del día anterior, el sábado, en La Noria, el único programa que yo pensaba que se podía salvar de la quema de esta programación que parece diseñada por un psicópata, la mesa de debate dedicada a si tendría tirón político esta señorita ( ojo, un 8% de los votantes la apoyarían), y el domingo, por si no teníamos bastante, resulta que van a repetir íntegramente el documental del jueves. De locos. Mi dedo pulgar cansado de hacer zapping, intentando encontrar algo que merezca la pena. Y lo peor no es eso. Los minutos que me quedo viendo el tema alucino con el poder de abducción que tiene este personaje, todos la apoyan, todos la defienden, es maravillosa, es única, es popular… es una tía que se ha liado con un torero, se ha quedado embarazada y está chupando del bote que da gusto. ¿Y nadie ve esto? 24.000 euritos que se lleva la señora por sentarse en un plató. Y además es que es ordinaria, barriobajera y maleducada.

Cuando tomamos el café en el trabajo, escucho a compañeras que se han levantando a las siete o siete y media de la mañana, han dejado preparada su casa, la comida para los suyos, están en su trabajo puntuales y cumpliendo con su deber. Salen, después de una jornada de ocho horas, casi a las cinco y media de la tarde, no comen en su casa, tienen que hacer la compra o ir al dentista, a recoger la chaqueta a la tintorería o al hospital a acompañar a algún familiar enfermo.El último recado que no falte, visitar a los padres tampoco, todo ello aderezado de baños de hijos, cena, plancha ( que si no se queda atrasada) y cuando consiguen sentarse en un sillón rozando las diez de la noche, es con un ordenador delante para preparar una clase para el día siguiente o corregir unos exámenes. Y así caen extenuadas por la noche en el colchón, dando gracias a Dios porque hay trabajo y los "peques" no están enfermos, pues si la fiebre aparece hay que hacer malabares para poder ir a trabajar y cuidar de los tuyos.

¿Princesa del pueblo? No te puedes imaginar, chupóptera Esteban, la de REINAS que hay por ahí, sacando a sus familias adelante, casi sin descanso, por un sueldo irrisorio. Han estudiado carreras, tarde tras tarde, noche tras noche; sumaron cursos y jornadas para ser las mejeores en los suyo, mientras gente como tú se dedicaba a contemplar la vida y sólo pensaban en la mala suerte de nacer en un familia humilde, pero sin un ápice de superación entre las venas.

Vergüenza te debería de dar, y a los que te siguen y te ven, también.

La pena es que tenemos lo que nos merecemos: basura en una sociedad que no prima el esfuerzo y la superación, sólo el nivel de éxito y de famoseo que te dan los platós vendiendo tu miserable vida y la de los demás.

Maravilloso legado para nuestros hijos.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

Primero...

Hora del merecido descanso después de una jornada de miércoles de las que te dejan derrumbada. El sofá, la cena delante y consigo llegar casi a las últimas noticias del Telediario. Ante mis ojos, la ministra de Economía¿? explicaba, como si no tuviese mucha importancia, la subida de impuestos para los que tienen la renta más alta. No me acerco ni por asomo a las cifras que dan, sin embargo, se me viene a la mente este pensamiento que leí hace mucho tiempo:

“Primero, vinieron por los judíos, y no protesté porque no era judío;

Luego, vinieron por los comunistas, y no protesté porque no era comunista.

Entonces, vinieron por los católicos, y no protesté porque no era católico;

Luego vinieron por los de las Uniones sindicales, y no protesté porque no era sindicalista;

Finalmente vinieron por mí, y no quedaba nadie para protestar por mí.”

Pastor Martin Niemöller

Traducido a lengua castiza: " Cuando veas las barbas de tu vecino cortar...". Lo dicho.

miércoles, 1 de septiembre de 2010

Se ha marchado agosto

Se ha marchado agosto. Mes de fuerzas ocultas, de luchas internas. Los sentimientos toman vacaciones también en verano y se dedican a jugar con las almas cansadas de todo el invierno. Son ingobernables, deciden dar nostalgia cuando debe embargarte la alegría y te llenan las ganas de vivir. Contracturas musculares en el cuerpo y en la ilusión. Tiene que ser que cuando deseas algo con mucha fuerza y finalmente te llega, descubres que merece la pena soñar con ello antes que vivirlo.

Ya se marcha otro estío; llega el opaco otoño, con sus tardes encogiendo, con su quehacer monótono y cotidiano, con su manto de normalidad. ¡Bendito otoño! Los sentimientos otra vez en su sitio, con fuerzas renovadas, dispuestos a enfrentarse a muchos otros minutos de vida, acompasada y tranquila.

Adoro la luz del verano en mi piel, pero siempre oscurece mi interior.Mejor no tener tiempo de descanso. Nunca me da paz.

viernes, 13 de agosto de 2010

jueves, 12 de agosto de 2010

Que me lo expliquen



Hoy entrada breve. Este calor no me da para escribir mucho.
Reflexión:
El Parlamento catalán aprueba la prohibición de las corridas de toros. Alegan el sufrimiento y muerte del animal, aunque todos sabemos que, en realidad, lo que han prohibido es una fiesta nacional porque España molesta. Ante mi perplejidad escucho a la portavoz del grupo de los Verdes, explicando que hay una Ley de defensa de los animales y los toros estaban excluidos de esta ley, y lo que han aprobado es su defensa. Los que me conocen saben que he ido poco a los toros y que el animal me conmueve. Soy más táurica que taurina. Me gusta más el animal que el torero. Su belleza es tremenda y si tienes la suerte de contemplarlo libre en la dehesa, es de lo más hermoso de la fauna animal.

Eso sí, se le olvida decir que sólo han prohibido las corridas de toros, en todas las demás fiestas catalanas que tienen al toro como elemento de diversión, léase los toros ensogados, aquellos a los que les ponen fuego en las astas, etc, esas no se prohíben.

Es decir, que un toro en una plaza, cara a cara con un hombre, pudiendo vencer, luchando por su vida y con dignidad, no, pero con sogas o fuego durante horas, siendo apaleado, empujado, maltratado, sí. Pues va a ser que no lo entiendo. Y encima tienen la desfachatez de explicar que el coste político sería muy alto si prohibiesen estas fiestas de la tierra. Obviamente, al pueblo dale carnaza y tú los votos al bolsillo.

Y hoy escucho en las noticias que hay una sobrepoblación de palomas en Barcelona y que van a recogerlas en jaulas y matarlas con CO2.
Mala suerte las de las palomas. Si hubiesen tenido cuernos y representasen la tradición, la fiesta y la cultura de España…otro gallo les hubiese cantado en tierras catalanas.

sábado, 31 de julio de 2010

Tony Zenet en Santa Catalina

El viernes pasado, de nuevo tuve la oportunidad de asistir a un concierto en el Castillo de Santa Catalina. Es una fortificación cerca de la playa de La Caleta, dando a esa precioso mar de Cádiz. Otro atardecer de caerse la baba y mi admirado Tony Zenet. ¡Qué lujazo!
Zenet actuó con traje de chaqueta, corbata y su sombrero. En la tercera canción era una sopa, el pobre. Tuvo la mala suerte de compartir escenario con un levante en calma. El público estábamos en la gloria, pero él, vestido con dos mangas y con los focos, repetía secándose el sudor con una toalla: “qué suerte he tenido, me ha cogido el cambio de viento”. Sin embargo no se quitó su chaqueta. Estaba actuando y metido en su papel. Es un actor de primera. Con sólo cuatro músicos consiguió embelesarnos en cada canción. La verdad es que con sólo las tres primeras notas de su primera canción ya estábamos todos disfrutando.
Sus letras son sencillas, pero endiabladamente juega con las palabras para hacerte creer que más de una canción se compuso pensando en ti. Os traigo una de las más conocidas, con la que dio comienzo el concierto, consiguiendo que hasta a las murallas del castillo se le erizaran los vellos. Aquí una maravillosa versión junto a Miguel Poveda: ¡tremendos ambos!


lunes, 12 de julio de 2010

Para que no se me olvide

Será que sólo tengo una hija y para mí es lo más importante de este mundo. No descubro nada nuevo a todo el que sea padre o madre. Los hijos son prolongaciones nuestras y sus miedos, sus fracasos y sus dolores los sentimos doblemente, igual que sus éxitos y alegrías nos llenan de orgullo.
Hace unos días tocaba recogida de notas finales de curso. Sus calificaciones han sido muy buenas, buenísimas, y se las merece después de todo un curso de trabajo, con un horario de clases extenso y, a veces, con poco tiempo para llevar todo adelante. Sin embargo no ha sido lo más importante. Ha sido distinguida entre todos los alumnos de su clase y le entregaron una placa por su actitud ejemplar durante este curso: por su compañerismo, por su cariño con profesores y saber estar, por su esfuerzo y sus ganas de trabajar siempre. Como comprenderéis esto es mucho más significativo que sus calificaciones. Ya hablé en una entrada sobre ella (Generosidad, tienes nombre de mujer), pero este premio es la confirmación de que aunque yo, como madre suya, vea sus muchas virtudes, otros también las ven y las reconocen. Y eso me llena de orgullo, nos llena de orgullo a su padre y a mí. No ha tenido la mejor infancia que le hubiéramos podido dar, pero ella ha sido capaz de superar, hasta ahora, lo que parecía insuperable.

Cuando apoyé la cabeza en la almohada por la noche, después de una tarde llena de alegría, pensaba en todo lo bueno que me da. Y llegó este “para que no se me olvide”.
Porque puede que lleguen los tiempos en que discutamos por la ropa, que nuestros gustos no coincidan, quizás riñamos porque sus notas han bajado, porque no le compré la moto que quería, porque sus horarios de salida no me parezcan adecuados y ella luche por quedarse un rato más, porque no me gusten las amistades que la rodean, porque no quiera recoger su habitación o no estemos de acuerdo en ese viaje.

Y llegará, seguro que llegará, y entonces tendré que obligarme a recordar todo lo bueno que me ha dado en estos años, todas sus virtudes, aunque la edad las esconda bajo una lona de indiferencia, sus horas de compañía, aunque la adolescencia la invite a pasar poco tiempo conmigo, sus abrazos y besos, aunque puede que no se acuerde de dar una llamada de teléfono en días, en fin, todo lo que la edad oscura esconderá, me obligaré a recordarlo, minuto tras minuto.

Por eso escribo hoy aquí, para que no se me olvide y pueda compensar esos momentos con todos los buenos y la recuerde siempre como es, aunque la edad adolescente intente presentármela de otra forma, no será ella, ella es la que es: maravillosa.
Así que, para que no se me olvide.

martes, 22 de junio de 2010

Ponte Milvio

Roma es parada soñada para peregrinos y obligada para todo el que habite este planeta. Ciudad bellísima que he tenido la suerte de redescubrir (parece que arrojar la moneda en la Fontana di Trevi con el deseo de volver funciona), aunque esta segunda vez acompañada de cuarenta alumnos de Bachillerato en su viaje final de curso.
Planeando el viaje, muchos de ellos preguntaban si visitaríamos el Ponte Milvio. El interés por este puente radica en un libro, Tengo ganas de ti, cuyo autor, el escritor italiano Federico Moccia, se ha hecho famoso escribiendo novelas dirigidas a adolescentes, y a no tantos adolescentes. La calidad literaria no es que sea de Nobel, es más, en algunos pasajes brilla por su ausencia, sin embargo, los engancha con historias de amor y vida entre jóvenes como ellos con los que se sienten plenamente identificados. He leído un par de títulos (me los pasaron mis alumnos, así les tomo el pulso a sus lecturas) y entiendo que la historia de amor de Step ( macarra, pero de buen corazón), los tenga, sobre todo, “las tenga” tan obsesionados, hasta el punto de que los de 3º cuando terminaban las actividades en clase, sin decirles nada sacaban los libros y se dedicaban a leer casi a hurtadillas ( asombroso!).
Bien, pues los protagonistas del libro sellan un día su amor en este puente, el más antiguo de Roma. Escriben sus iniciales en un candado, que enganchan a un farol del puente y arrojan sus llaves al río Tíber. Y allí me veis, tomando un autobús (para los interesados, el número 2 desde la Piazza del Pópolo) con un mogollón de adolescentes deseando visitar este puente y recorriendo unos cuantos kilómetros.
Fascinante. Me quedé sin palabras. Es increíble como una historia de ficción puede convertirse en realidad. Los jóvenes romanos y los foráneos también han llenado el puente de candados selladores de su amor. Hay cientos de candados por todas partes (el farol no ha soportado el peso de éstos y ya se ha caído dos veces, así que las autoridades decidieron instalar unas cadenas en las paredes del puente para poder seguir colgando candados).
Es imposible estar allí y no sentirte arrastrado por esa lengua de amor y romanticismo que recorre el puente, aunque no seas romántico, aunque no estés enamorado. Mi compañera y yo,¡viejas y pellejas!, allí nos vimos comprando un candado y enganchando sentimientos a esas cadenas del puente, contagiadas por la ilusión de nuestros alumnos que se pasaban los rotuladores y las llaves unos a otros ( por supuesto, hay un señor que los vende allí, el negocio es el negocio).
Ocho y medio de la tarde, un atardecer y una luz de la de postales y la nostalgia de los tuyos aplastándote mientras las entrañas se te retorcían de ausencia. No tiré las dos llaves al río. Ellos sí, todavía creen en el amor eterno. Cerré un candado por decisión propia, sin preguntar y de forma unilateral. Así que me quedé con una llave que ha vuelto conmigo a casa. Esa llave tiene dueños. Algún día si van a la ciudad eterna se la entregaré. Entonces, si así lo desean y sienten, que la arrojen para siempre a las aguas del río Tíber, y si no, que abran el candado y lo quiten, ¡si lo encuentran!


miércoles, 9 de junio de 2010

Caperucita y el lobo machista

De todos es conocida una de las últimas estupideces de nuestra brillante ministra de Igualdad, Bibiana Aído. Flaco favor nos está haciendo al resto de las mujeres de este país y sobre todo a las mujeres rubias. Está bordando el estereotipo. A lo que iba, imprescindible para este país que se reescriban los cuentos tradicionales de toda la vida, porque en ellos la violencia contra la mujer y el machismo es patente.Un sueldo para esto...

Os dejo con la respuesta de mi admirado Arturo Pérez Reverte.

CAPERUCITA Y EL LOBO MACHISTA

Hoy me he levantado con talante. Como después de haber publicado 'El pequeño hoplita' –un cuento sobre un niño en las Termópilas, que tanto debe a su magnífico ilustrador, Fernando Vicente– le tomé el gusto a la narrativa infantil, he decidido echar un cable. Ayudar a que nuestra ministra de Igualdad y Paridad, Bibiana Aído, rubia joya de la corona, haga realidad su bonito proyecto de conseguir que los cuentos tradicionales para pequeños cabroncetes sean desterrados de escuelas y hogares, y dejen de ser un reducto machista, sexista y antifeminista. O que, expurgados y reconvertidos a lo social y políticamente correcto, contribuyan, ellos también, a la formación de futuras generaciones de ciudadanos y ciudadanas ejemplares y ejemplaras. Como está mandado.

Al principio pensaba hacerlo con el cuento de 'Blancanieves y las siete personas de crecimiento inadecuado'; que, como sostiene Bibiana, requiere, título aparte, una remodelación general urgente. Pero ciertos indicios de intolerable violencia machista en la casita del bosque, como que sea una mujer quien cargue con todas las labores del hogar, o que no haya paridad de sexos en el número de individuos que trabajan en la mina –su número impar complica además el asunto–, me decidieron a dejarlo para más adelante. Lo intenté luego con 'La soldadita de plomo y ploma'; y no es por echarme flores, pero lo tenía casi resuelto. Una soldadita de plomo de la ULFF –Unidad Legionaria Femenina Feroz–, terror de los talibanes afganos y de los piratas del Índico, impedida en su extremidad locomotriz por haber caído poco metal en el molde cuando la fundían. O sea, incompleta física de una pierna, para entendernos. O no. Lo que antes se decía, en jerga fascista, coja. Y que, desde su repisa en el cuarto de juegos de una niña, se enamora de un bailarín de ballet de papel maché que está enfrente, puesto tal que así, de puntillas, y que tiene una bonita lentejuela de plata en el prepucio. Se lo leí a mi hija por teléfono, a ver qué tal iba la cosa; pero al llegar a lo de la lentejuela me aconsejó dejarlo. Te van a malinterpretar, dijo. Así que al final me decidí por un clásico inobjetable: 'Caperucita Roja'. Y está feo que lo diga, pero la verdad es que lo he bordado. Creo.

Caperucita Roja camina por el bosque, como suele. Va muy contenta, dando saltitos con su cesta al brazo, porque, gracias a que está en paro y es mujer, emigrante rumana sin papeles, magrebí pero tirando a afroamericana de color, musulmana con hiyab, lesbiana y madre soltera, acaban de concederle plaza en un colegio a su hijo. Va a casa de su abuelita, que vive sola desde que su marido, el abuelito, le dio una colleja a Caperucita porque no se bebía el colacao, ésta lo denunció por maltrato infantil, y la Guardia Civil se llevó al viejo al penal de El Puerto de Santa María, donde en espera de juicio paga su culpa sodomizado en las duchas, un día sí y otro no, por robustos albanokosovares. Que también tienen sus necesidades y sus derechos, córcholis. El caso es que Caperucita va por el bosque, como digo, y en éstas aparece el lobo: hirsuto, sobrado, chulo, con una sonrisa machista que le descubre los colmillos superiores. Facha que te rilas: peinado hacia atrás con fijador reluciente y una pegatina de la bandera franquista, la de la gallina, en la correa del reloj. Y le pregunta: «¿Dónde vas, Caperucita?». A lo que ella responde, muy desenvuelta: «Donde me sale del mapa del clítoris», y sigue su camino, impasible. «Vaya corte», comenta el lobo, boquiabierto. Luego decide vengarse y corre a la casa de la abuelita, donde ejerce sobre la anciana una intolerable violencia doméstica de género y génera. O sea, que se la zampa, o deglute. Y encima se fuma un pitillo. El fascista. Cuando llega Caperucita se lo encuentra metido en la cama, con la cofia puesta. «Que sistema dental tan desproporcionado tienes, yaya», le dice. «Qué apéndice nasal tan fuera de lo común.» Etcétera. Entonces el lobo le da las suyas y las de un bombero: la deglute también, y se echa a dormir la siesta. Llegan en ésas un cazador y una cazadora, y cuando el cazador va a pegarle al lobo un plomazo de postas del doce, la cazadora contiene a su compañero. «No irás a ejercer la violencia –dice– contra un animal de la biosfera azul. Y además, con plomo contaminante y antiecológico. Es mejor afearle su conducta.» Se la afean, incluido lo de fumar. Malandrín, etcétera. Entonces el lobo, conmovido, ve la luz, se abre la cremallera que, como es sabido, todos los lobos llevan en la tripa, y libera a Caperucita y a su provecta. Todos ríen y se abrazan, felices. Incluido el lobo, que deja el tabaco, se hace antitaurino y funda la oenegé Lobos y Lobas sin Fronteras, subvencionada por el Instituto de la Mujer. Fin.

XLSemanal, 30 de Mayo de 2010

jueves, 3 de junio de 2010

Cierto día

Cierto día decidí vaciarme. Vaciarme para poder llenarme ordenadamente, como esos anuncios de televisión de las tres de la mañana en el que un señor nos enseña una y otra vez un armario desordenado repleto de prendas de colores, aquí una manga morada, allí un cuello de camisa azul, por allá un pañuelo de flores desgastadas, por acá asoma lo que parece un jersey de lana marrón…No importa, tenemos la solución, se vacía el armario, y doblamos las prendas ordenadamente en bolsas de plástico a las que se les extrae el aire del interior, ocupando poco espacio y de este modo tenemos la posibilidad de introducir más prendas en este armario que queda ordenado por colores y con el doble de espacio en su interior.

Así decidí vaciarme. Sacar todo. Desde el fondo. Que no quedase nada dentro. Una vez fuera, sólo era cuestión de ir ordenando, casi haciendo jerarquías. Los defectos a una bolsa transparente grande, ya que son muchos, y al estante de la izquierda, la siniestra, es el lado que menos sigue la mirada; las virtudes, que no son muchas, las pondremos en esta bolsa, pequeña, y la colocaremos en el estante de en medio, porque ahí es donde dicen que debe estar la virtud; los deseos los pondré en esta bolsa de flores de colores, arriba, a la altura de los ojos, que no los pierda de vista, así no podré olvidarlos; los miedos en esa bolsa minúscula, la oscura, irá al cajón inferior, ese que está desvencijado por los años y me cuesta abrir, así no los veré durante mucho tiempo…

Y así comencé a extraer todo mi interior, a derramarme por el suelo de la habitación, a fragmentarme en pedazos que ocupaban, paradójicamente, espacios irregulares en mi mundo exterior. El deseo de correr aventuras me pareció más grande de lo normal, el miedo a la enfermedad y a la pérdida, un gigante amenazador, el esfuerzo y la constancia no me parecieron tan enormes, la añoranza ocupaba media cama vacía, el odio negro me resultó más claro, la verdad clara, más gris, los ratos de alegría que me había dado la vida los tendría que recoger y reunirlos todos en una caja dorada que depositaría en un lugar agradable y perfumado, los ratos de tristeza, afortunadamente no eran muchos, pero sí pesados, no podrían ir a ningún estante principal, tendrían que ir al altillo, la envidia, que pensé minúscula, ocupaba más espacio del deseado, afortunadamente también la generosidad, aunque extrañamente estaba muy cerca del egoísmo… y pasé días mirando hacia todos los rincones de mi habitación buscando defectos, virtudes, deseos, anhelos, miedos, fracasos, y meditando, ahora que yo estaba vacía, que no me quedaba ni el aire, que mi interior era la nada, cómo ordenar todo mi caos interior, para llenarme de nuevo.

Tras más tiempo del que pensaba fui introduciendo todo en bolsas transparentes, de rayas, de flores, de cuadros, algunas oscuras, otras brillantes y les extraje el aire. Así quedaron los defectos apretados y parecían menos, las virtudes aplastadas y también parecían menos, ocupando más espacio la humildad, a la bolsa de los deseos me costó sacarle el aire, pero lo conseguí, y quedaron menguados, reducidos, aplastados, así era más fácil que los latidos del corazón marcaran un ritmo más monótono, los miedos no dejaban cerrar la cremallera y me obligaron a utilizar dos bolsas: una la rotulé con el nombre de “ los miedos conscientes” y la otra con “ los miedos inconscientes”, estos últimos son los peores y los que pueden aflorar cuando menos lo esperas y desordenar el estante superior.

Y lo conseguí. Cada bolsa ocupó su estante y su cajón. Orden completo. Tranquilidad interior. Equilibrio. Bienestar.

Aunque nunca he sido ordenada, lo conseguí durante mucho tiempo.

Hasta que llegaron tus ojos. Y lo supe. Y el saberlo no me preocupaba, pues me enseñaron que el saber no ocupa lugar, pero, ¿el amor? ¿No era eso que decían que lo ocupaba todo? Y ahora, ¿dónde lo metía? ¿En qué estante? ¿En cuál cajón? No tenía bolsa para él, ni espacio, ni lugar.
Y sin darme apenas cuenta, apretando los deseos, escondiendo de la vista los miedos, aplastando los fracasos, y toqueteando por aquí y por allá, cupieron, tus ojos cupieron en ese armario en el que todo volvió a quedar patas arriba, más desordenado que nunca.

Para Gonzalo.
Que pases muchos días más… en ese armario tan desordenado.

martes, 25 de mayo de 2010

Vuelta a la vida...creo

Regreso después de más de un mes sin escribir...y casi sin entrar en el blog. Sé que volver a repetir lo de la escasez de tiempo parece ya monótono y falso, pero la verdad es que ha sido un mes concentrado en dos semanas; menos mal que no siempre ha sido el trabajo lo que pone paréntesis a la vida, también ha habido algún que otro disfrute.

He estado haciendo un curso de correctora profesional que me ha quitado el poquito tiempo que tengo para dedicarle a los míos, a mí y a mi plancha, que se amontona heroicamente cual torre de Babel. Si lo unimos con la preparación de clases, corrección de exámenes, algo que he pintado por mi casa, acompañar a los abuelos a algunos recados, pues teníamos bodas y comuniones familiares, la feria que no puede nadie perdérsela, la gestión de papeles con la madre Hacienda,visitas de pintores y presupuestos para arreglar esa fachada devastada por tres meses de lluvia con mi particular tornado incluido,ha sido un mes de querer bajarse del mundo. Hasta el punto que iba dos días a la semana a clases de flamenco y tuve que abandonar. Era incapaz, la edad no perdona.Y no se me ocurre otra cosa, inquietud que pensaba que con la vejez se me pasaría, de ponerme a estudiar un curso tres meses que me ha dejado miope, con esas letrajas tan pequeñas. El examen ha sido tremendo, pero acabo de recibir un mensaje con la noticia de que he aprobado y me siento ahora mismo más ligera, como la que no tiene nada que hacer, aunque la plancha sigue esperándome, tengo que terminar de pintar la casa, arreglar armarios, corregir exámenes, estreno de obra de teatro con los alumnos el viernes ( y nos faltan la mitad de los decorados)...

Pero vuelvo a darme diez minutos para entrar y a retomar este blog, para sentir que estoy aquí de nuevo, que todo comienza a volver a la normalidad, que el verano está cada vez más cerca, que tengo algo de tiempo para leer, que me marcho con mis alumnos unos días a Roma, ciudad bendita, que los rosales de mi jardín están impresionantes,en fin, para celebrar la vida. Lo necesitaba.

martes, 13 de abril de 2010

¿Qué es eso?

Sólo dura algo más de cinco minutos, pero merece la pena...


martes, 6 de abril de 2010

¡Enhorabuena profesor!

Mi padre carga ya sobre sus espaldas 82 años. Y como se suele decir “ no han pasado en balde”. Unos achaques debido a la edad lo han obligado a pasar algunos días de este último trimestre en el hospital. No son graves, pero lentamente le van limando las fuerzas y la energía.

Me encontraba acompañándolo un día de esta semana, cuando la puerta de la habitación se abre y pide permiso para entrar un médico de unos 60 años. Se dirige hacia mi padre y le pregunta:

-Don Francisco Beláustegui Elorza, ¿verdad?

Seguidamente le ofrece la mano y toma la de mi padre que le devuelve el saludo. En esos cinco segundos a mi padre solo le da tiempo a mirar rápidamente la tarjeta prendida en la bata del médico y leer su nombre.

-Doctor Reyes- le contesta, sin soltar éste la mano de mi padre que sigue manteniendo asida durante unos minutos, siguiendo con el vaivén del saludo hacia arriba y hacia abajo. Mi padre y su exquisita educación no se atreven a preguntar nada más y espera a que el médico le explique su efusividad.

- Francisco, usted seguramente no me recordará, pero usted fue mi profesor hace 55 años en el Centro Obrero de San Fernando. Usted me preparó para ingresar en el bachillerato.

Mi padre abre los ojos emocionados y una tímida sonrisa ensaya en su boca.

-Usted me dejó marcado. Ha sido uno de mis mejores profesores, me encantaba su manera de dar clases, su forma de contar las historias, las anécdotas. Nunca lo he olvidado. Y hoy he visto su nombre en los documentos de ingreso en el hospital y he decidido venir a saludarlo y a darle las gracias. Gracias a usted pude entrar en el bachiller y estudiar posteriormente medicina.

Pude ver la emoción reflejada en forma de lágrimas en los ojos de mi padre. Ellos siguieron hablando y recordando mientras yo pensaba, también emocionada, que mi padre acababa de tener una de las grandes satisfacciones de la vida. Los que se dedican a la enseñanza, con vocación, saben a lo que me refiero. No trabajamos con tornillos, coches o electrodomésticos. Trabajamos con y para personas. Las instruimos y formamos. Les enseñamos una materia de conocimiento y también les damos parte de nosotros, los marcamos, a veces de forma positiva y otras, espero que las menos, de forma negativa. Y hoy mi padre estaba recibiendo el mejor premio a su trabajo. La gratitud, el recuerdo de un alumno que no lo ha olvidado y que, medio siglo más tarde, va en busca de su antiguo profesor únicamente para darle las gracias. ¡Qué envidia, papá! ¡Cómo me hubiera gustado asistir a una de tus clases! ¡Sé de lo que hablaba ese hombre! Hemos disfrutado muchas veces, a la hora de comer todos reunidos alrededor de la mesa, de tus historias, tus personajes, tus autores y sus citas famosas, y te imagino ante un grupo de chavales dando lo mejor de ti, con tu paciencia y ternura.

¡Enhorabuena, profesor!

miércoles, 24 de marzo de 2010

Vejer -Xauen II





































Me envía Jose ( muchas gracias) unas preciosas fotos de Xauen que me faltaban para poder demostrar la belleza de esta pequeña ciudad. Después de contemplarlas, es un viaje pendiente, ¿no?

sábado, 20 de marzo de 2010

Vejer - Xauen

Hace unas semanas estuve pasando el domingo en Vejer de la Frontera. Todo un lujo. El día nublado (obviamente!), pero la lluvia nos dio un respiro. El pueblo casi vacío, se escuchaba el silencio. Y todas las calles para nosotros. Un paseo tranquilo y atento para reflexionar y hacerte consciente de la belleza de este pueblo blanco cal de nuestra provincia. Hacía muchos años que no lo visitaba y no recordaba sus callejuelas blancas serpenteantes, sus rejas y balcones, y las vistas del mar y la comarca que, gracias a la altura, puedes disfrutar. Vejer es uno de los pueblos blancos más representativos de nuestra provincia, con un pasado árabe inconfundible.



Paseando por una de esas callejuelas encontramos el siguiente mosaico de azulejos.




Cuenta una leyenda que Sidi Ali Ben Rachid, emir marroquí, se enamoró y se casó con una lugareña de Vejer llamada Zhora. Cuando los musulmanes fueron expulsados, cruzaron el Estrecho y se asentaron en el emplazamiento de una pequeña población bereber. El emir, para mitigar la nostalgia que tenía su amada de su pueblo, mandó construir una ciudad a semejanza del pueblo de la Janda. La ciudad fue fundada en 1471 y bautizada como Xauen o Chaouen. Su población original estuvo compuesta en su mayoría por exilidados de Al-Ándalus y se convirtió en un destino privilegiado llegando a contar con unos 10.000 habitantes entre marroquíes, andaluces y judíos.
La ciudad de Xauen presenta una apariencia similar a la de Vejer, con pequeñas callejuelas irregulares y casas encaladas, frecuentemente en tonos azules. Aunque estaban hermanadas por esta historia de amor, el hermanamiento oficial de ambas ciudades se llevó a cabo el 19 de julio del 2000.

Aquí os dejo algunas fotos de Vejer tomadas por Arbaro. Si queréis ver más , pues pinchad. No he viajado a Xauen y no tengo fotos, pero os dejo unas que he encontrado por estos mares tecnológicos.
































Aparte de la belleza de los dos pueblos, lo mejor de esta historia, a mi parecer, es que cuando tu mundo se destruye, alguien sea capaz de construirlo de nuevo para ti...sólo por amor.


viernes, 12 de marzo de 2010

Nube Gris

Tengo un buen amigo que me ha bautizado con este nombre. Me dice que si yo hubiese sido india, de las de las plumas de colores y las trenzas, mi nombre hubiese sido Nube Gris. Y lleva toda la razón del mundo. Parece que tengo una nube en la cabeza y como quiera moverme a algún sitio siempre me llueve. También me bautizó hace tiempo como María Tormentas.
Diréis que este año eso le ocurre a todo el mundo, pero no, va más allá, no es algo de ahora que no para de llover, sino que viene de más atrás. Si hay posibilidad de lluvia o tormenta una semana, se va desplazando hacia un día u otro según mis planes. Si dan agua para el martes y yo tengo planes para el viernes, no hay duda, llueve el viernes. Si sólo predicen una leve llovizna y me aventuro a salir, la tormenta es tremenda. Este amigo me manda hasta mensajes pidiéndome que cancele mis planes para así tener un buen día. Viajé con él una semana a Tenerife y no vimos el sol en los siete días. Aunque me defendía explicándole lo de la famosa “ panza de burro” en aquella isla, nada, él defendía que era porque yo estaba allí.

Había planeado el puente de Andalucía “ un viaje y ,por supuesto, se tenía que formar la denominada “ ciclogénesis explosiva”, la tormenta perfecta. Ea, todo el país en alerta y agua y viento por todas partes. Lo intenté el viernes, el sábado, pero al final desistí , estaba claro que no era un fin de semana para aventurarme ya que mi destino estaba en alerta naranja.
Al principio me tomaba esto a broma, son coincidencias, sin embargo, de un tiempo a esta parte, he empezado a plantearme que ese amigo lleva razón. Mi relación con el agua es extraña, si no voy yo a buscarla, viene a buscarme a mí. Y así lo ha hecho. Cancelé mi viaje para evitar el agua, pero ella ha decidido que estemos en contacto de otra manera, inundando el sótano de mi casa, después de que mi ángel de la guarda se llevase por la mañana dos horas desatascando la ducha de mi baño, que pudo arreglar, ¡ gracias a Dios!

Lo normal que le ocurriría a cualquiera sería que se le rompiera una tubería o un bajante. Pues no, no es mi caso; como está lloviendo tanto, el agua está buscando por donde salir, y no se le ocurre otra cosa que hacerlo por las losas de mi sótano; el nivel freático está a tope y buscando sitio ha llegado a reventar las losas y dejarse correr. No he hecho los cálculos, pero unos veinte metros cuadrados y diez centímetros de altura son unos cuantos litros de agua. Más o menos al llegar al cubo número ochenta dejamos de contar y todavía me quedaban un par de horas más de recogida de agua. Menos mal que tenía cuatro pares de manos más y en unas cuatro horas conseguimos ver el suelo.

Sólo ha durado una semana. Con las lluvias del pasado sábado, de nuevo vuelvo a estar inundada y, esta vez, con unos centímetros más.

Sólo me queda resignación y volver a recoger , rezar y esperar a que deje de llover para poder arreglar el desaguisado, rezar para que el seguro me cubra el desastre, rezar para que dejen de pasar cosas en esta casa ( por supuesto, lavavajillas estropeado este mismo mes, hay que comprar otro pues es igual de caro el arreglo que la compra del nuevo, ley de Murphy, si algo está roto será la pieza más cara del aparato) y hacerme a la idea que después de la inundación seré bautizada , ahora , como Pies Grises.

O Gris, sólo Gris como me siento este mes…
PD: Hoy viernes ha salido el sol y el ánimo es distinto. Por favor, que dure!!!!

miércoles, 24 de febrero de 2010

Cerradura


Momento mágico. Sólo se siente y escucha el silencio. No hay aire, ni viento, ni brisa, ni ruido. Nadie a tu alrededor, ni seres, ni mundo, ni palabras. Soledad. Te inclinas a mirar. Un diminuto orificio por el que traspasa la luz. Y, de repente, tú también te vuelves diminuto, segundo a segundo. Y ya no tienes algo más de cuatro décadas a tus espaldas que pesan casi como un siglo; sientes la curiosidad de tus cuatro o cinco años. Y te vas inclinando suave y lentamente, como el que teme que un movimiento inadecuado rompa la magia del momento. Tu ojo va por delante, a la vanguardia, promete enviar la información a los sentidos lo antes posible, pero desea llegar el primero a aquel orificio de luz que tantos secretos esconde: la otra parte, lo de más allá, lo desconocido. Apoyas tu mentón sobre la puerta y la pupila se pone en alerta.

Y ahí está…


lunes, 22 de febrero de 2010

Por favor...









ORACIÓN PARA QUE DEJE DE LLOVER

Hace días que no cesa la lluvia, Señor.
La tierra está húmeda y ya huele a podrido
la nueva sementera.
El perro duerme
y gruñe entre sueños, y, a veces, ladra de noche.
Señor, la tierra es fértil y gasté en abonarla
y sudaron en ella mi mujer y los hijos:
si se pierde lo sembrado, no habrá
fiesta de cosecha, ni pagaremos diezmos a tu cura.
Alguna vez pasaste por mi campo:
de seguro te habrás robado alguna espiga:
Yo te daré, Señor, la mitad de lo que cojamos,
pero haz que deje de caer el agua,
danos sol un día solamente a la semana y déjanos vivir.
Así sea.

Cesar Dávila Torres
(1932- )

viernes, 19 de febrero de 2010

Gracias...


Por esos cinco mil “clicks” en el ratón del ordenador que han permitido que durante este año entrarais en mi particular ventana al mundo. Gracias a los seguidores diarios, a los que entráis asiduamente, a los que llegaron por despiste y a los anónimos que ,desde tantos lugares, habéis querido compartir desde la distancia palabras que unen.
Cinco mil gracias.

viernes, 12 de febrero de 2010

No te fíes

No toda la poesía es clásica...



.....Te quejas a menudo —y te pones
bastante pesadita, dicho sea
de paso, no te ofendas— porque dices
que mis versos te quieren más que yo.

.....Bueno, bueno. Podría replicarte, pero, ¡huy!,
te conozco de sobra, no me oírias,
así que bueno, vale, O. K., d'accord.
Y no es por defenderme, pero, vaya,
al menos, digo yo, si estás de acuerdo,
podríamos discutirlo, ¿te parece?

.....Porque, vamos, ¿qué hacen ellos por ti?,
eso, ¿qué hacen? ¿Te acompañan? ¿Van
contigo al cine, de paseo? ¿En bici?
¿Te escuchan cuando estás que bla, bla, bla?
¿Te llaman, cada día —repitopitopito:
cada día (que menuda factura)—
por teléfono? ¿Eh?

.....Ten cuidado, so ilusa. No te fíes
ni un verso. Mira que ellos
—después no vengas con que no te aviso—,
ellos te quieren, sólo, de palabra.

[Abel Feu, Feu de erratas, Renacimiento,
Sevilla, 1997, pp 58-59]

lunes, 8 de febrero de 2010

Cadenas

Hoy he vuelto a verte sentado en el último peldaño de la escalera, oliendo mi cuello antes de aquel viaje; abriendo la puerta de la calle casi creí que ibas a estar detrás de ella, a punto de abrazarme para decirme qué bien olía; conduciendo el coche he podido ver de nuevo tus ojos disimulando sobre mi escote y tu sonrisa enredada en el dobladillo de mi falda, que intentabas subir más con la mente que con las manos. Y de nuevo no me has dejado bajarme del coche, entre risas, a comprar tabaco porque mi vestido, según tú, era muy corto. Y delante del ordenador he esperado ver aparecer el mensaje que me indicaba que estabas conectado como entonces, aunque ni yo misma estaba conectada. Y el termómetro marcaba 35º, y era la piel de un color bronce tras la tarde de arena y sal, y me he pasado media tarde al sol, sentada en el escalón de la entrada de casa, con un refresco en la mano…

Pero es febrero y llueve.

Y en mi rutina invernal sólo ha habido un gesto intruso y cambiante. He vuelto a usar ese perfume que hacía tiempo no utilizaba. Una fragancia más fresca que la habitual. Y ha sido un día extraño, como si hubiese conseguido introducir miles de sensaciones en el hueco de las palmas de las manos. ¿Qué mecanismos se ponen en funcionamiento en la mente para desencadenar esa fila de recuerdos sólo por un olor superficial, que se queda a ras de piel y que, sin embargo, se introduce hasta las entrañas del cerebro como saeta?

Malditas cadenas; no las que traen los demás para atarte, sino las tuyas, aquellas que arrastras con gruesos grilletes y que hoy han chirriado más que nunca, por su lejanía, por la nostalgia, porque me niego a perder eso…

... pero es febrero y llueve.

viernes, 5 de febrero de 2010

Orto...disgrafía

Me había levantado sin prisas y decidí desayunar con mi hija en la calle antes de que el implacable reloj parase su manecilla en las nueve, avisando de que era hora de la jornada diaria, larga jornada. Una acción insignificante y cotidiana, pero que llenaba de sentido esos mensajes de correo que recibimos invitándonos a disfrutar de los pequeños y breves placeres cotidianos.

Disfrutando de un agradable desayuno, tomo el diario local, que se edita todas las semanas y ojeo con rapidez las noticias. Un artículo de opinión me hace detenerme. La ortografía hoy en día es su título. Obviamente dediqué unos minutos a su lectura. Algo flojillo , no aportaba nada nuevo, no arrojaba ninguna luz al problema que se va asentando en nuestra sociedad en general y , en particular, entre nuestros jóvenes y no tan jóvenes.

Según el articulista, los errores ortográficos y en la expresión escrita de nuestros niños se debe a “ unos padres excesivamente descuidados en la educación de sus hijos, unos jóvenes que no dedican tiempo a la lectura … y unos maestros que no siempre emplean una didáctica eficaz”.
Conozco a padres muy implicados en la educación de sus hijos y éstos tienen faltas, chavales que dedican mucho tiempo a la lectura y tienen faltas y maestros que dedican muchísimo esfuerzo a corregir los errores y , lo que es mejor, a prevenirlos y sus alumnos siguen teniendo faltas. Obviamente, de todo hay en la viña del Señor.

El articulista menciona también el daño que hacen los mensajes a través del ordenador y de los móviles. Mis alumnos se ríen cuando les digo que yo escribo todos los mensajes de móviles con corrección, con signos de exclamación y respetando los signos de puntuación.¡ Se descojonan! Normal, ellos escriben para transmitir lo máximo con los caracteres mínimos y con la intención de que sea lo más barato posible. A mí me revientan las órbitas de los ojos cuando me llega un mensaje escrito de esa forma, soy incapaz de leerlo y me desagrada.

Todo esto es para contaros mi sorpresa cuando, a escasos dos centímetros del artículo que estaba leyendo, aparece un poema escrito por uno de los colaboradores del diario en el que leo “ de la lucha por vivir, del corage”, ¿ corage? , … pues va a ser que el coraje que yo conozco se escribe con j, la de toda la vida, la del puntito sobre ella. Y entonces ya me pica la curiosidad y me llevo el diario al despacho. Sin palabras: faltas de ortografía, tildes sin señalar o señaladas erróneamente , sujetos en singular con verbos en plural, faltas de coordinación… , tremendo.

Hoy en clase les he leído a mis alumnos de 3º de Secundaria el artículo para ver qué opinaban y luego les he enseñado el diario. Han decidido nombrarse “ cazafaltas” y me han pedido que todas las semanas lleve a clase un ejemplar para intentar localizar todos los errores posibles. Creo que como docente es una metodología eficaz: buscar todos los errores que aparecen en un diario. ¡ Y ahora a ver cómo los paro! Están deseando escribir una carta al director para informarle de todo lo que han encontrado. Creo que lo vamos a hacer, buena metodología para trabajar la expresión escrita, aunque no creo que le haga mucha gracia...

Así que, señor articulista, la escuela paralela que enseña los errores ortográficos la conforman los mensajes de móviles entre ellos, los mensajes de móviles en los programas de televisión ( vergonzoso), internet y sus miles de faltas en artículos y mensajes, y, desgraciadamente…hoy en mi clase, su diario también.

domingo, 3 de enero de 2010

Un beso de esos

Uno de los descubrimientos de este año que ha terminado ha sido la música de Toni Zenet: magníficas las letras, las melodías, la voz y la puesta en escena de este showman con voz rasgada. No os perdáis escuchar este disco ,Los mares de China, a ser posible con una copa en la mano y buena compañía.
Os dejo dos vídeos de una de las canciones que componen el CD, Un beso de esos.A mí me fascina la letra de esta canción; es sencilla pero y alegre, describe a la perfección lo que puede llegar a hacer un beso dado en el momento adecuado. Hay besos de los que cierran puertas y otros las abren y el beso de esta canción las abre de par en par.

En el primer vídeo podéis escuchar la canción.En el segundo, además de escucharla, podéis ver cómo os la cantan a través del lenguaje de signos para sordomudos. Es una delicia.

Para ti...un beso de esos.